Una bodega con tradición de más de 60 años en uno de los parajes más bellos de España, esto es: Galicia. Unos viñedos y bodega de elaboración exclusiva y exquisita, con una elaboración artesanal y respetuosa con el campo y la viña, con una vendimia manual y heroica.
Bodegas Don Bernardino de la Ribeira Sacra, de la zona de Amandi, que empezaron a elaborar cuando nadie más apostaba por esta zona.
La historia de la bodega se remonta a hace más de 30 años cuando tenían un restaurante en el que consumían el vino que le regalaba el abuelo de Emilio, Emilio. Éste tuvo viñas toda la vida, heredadas de sus Padres y Abuelos. Como ya el consumo era bastante alto y aprovechando la entrada de la zona Ribeira Sacra en “Vinos de la Tierra” que posteriormente se convertiría en D.O. Ribeira Sacra, decidieron hacer una bodega propia, haciéndose cargo de los viñedos de su Abuelo y empezando a recuperar otros que habían quedado abandonados en las riberas del Sil, debido fundamentalmente a la gran emigración que había sufrido la zona por los años 50 y 60.
Actualmente tienen una extensión de 10 Ha. Todos situados en unas pendientes de entre el 50 y el 85% de desnivel. Las producciones son muy bajas no alcanzando en algunos casos los 2500 Kg/Ha.
Estas bajas producciones y aprovechando la edad de más de un 50% de sus cepas, en algunas viñas más de 100 años, es la filosofía de trabajo que llevan en la bodega desde sus inicios. De una de estas viñas sale la joya de la bodega “Finca Mezquita”.
Además este buen hacer no es simplemente porque nosotras lo digamos, porque lo diga la bodega sino que viene refrendado por diversos premios nacionales e internacionales a lo largo de los últimos años, confirmando y consagrando la calidad de esta bodega gallega situada en la ribera del río Sil.
Don Bernardino Joven, presenta un color rojo cereza con reflejos violeta. En nariz es amplio, con una intensidad aromática fina y distinguida, reforzada por la carga de varietales propios de la uva mencía. En boca es intenso, elegante y equilibrado: un vino aterciopelado, una acidez bien ensamblada; con una fuerza alcohólica sutil, generosa y redonda que le confieren la elegancia y peculiaridad de los mejores vinos de Amandi.
Combina a la perfección con la cocina tradicional gallega, empanada, cocido, pulpo, carnes asadas, lamprea, solomillos, costilla y carnes de temporada como el jabalí, ciervo y venado.
Termina de enamorarte con esta bodega con este video. El vino que cuenta una historia….
Hay tantas cosas que se pueden decir de esta bodega, pero no quiero aburrirte más, quiero que tengas la oportunidad de probarlos, de disfrutar de sus aromas y sabor.
No olvides dejarme tu comentario sobre tu experiencia con estos vinos de Amandi.