Cercana a la capital argentina, se ubica uno de los rincones de mayor aporte histórico a nuestro país.
Colonia del Sacramento, la ciudad más importante de la zona, es actualmente Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, debido a la conservación de su casco histórico.
Fundada originalmente por portugueses, pero conquistada y perdida en varias oportunidades por los españoles, alberga en sus paredes cientos de historias, puesto que debido a su cercanía a Buenos Aires y a Montevideo, era un enclave fundamental en la época colonial. A principios del siglo XX, ayudado por la inestabilidad económica europea y por medio del puerto de Colonia, hacen su ingreso cientos de inmigrantes italianos, suizos, alemanes, españoles y hasta rusos; los cuales adaptaron las costumbres criollas sin perder las propias.
Quizás sea esa la explicación más “sencilla” del por qué desde ese momento Colonia es famosa por sus quesos, en particular el Queso Colonia.
En cuanto la vitivinicultura, es de las regiones de mayor antigüedad en cuanto a dicha industria. Destacan las primeras plantaciones de Riesling y Gewürztraminer en la región.
Para destacar tenemos la bodega Los Cerros de San Juan, una de las más antiguas que funcionan actualmente en el país, fundada por inmigrantes alemanes.
Un establecimiento muy bonito para visitar, con instalaciones de piedras y caminos internos, es realmente un pequeño poblado en base a la bodega. A destacar, su Riesling y Cabernet Sauvignon.
Vino muy claro y traslúcido, extremadamente floral en aromas, con alguna traza de vegetal sutil. En boca pasa velozmente, aunque no desapercibido. Un Riesling de nuevo mundo.
Es un vino intenso y carnoso. Perezoso en aromas, pero paciencia, llegan. Notas maduras, casi imperceptible la nota verde del Cabernet aunque cargado de frutas negras. Acidez elevada y taninos medios. Para apostar a futuro guardando alguna botella.
Otro proyecto interesante que está ubicado en Carmelo, es el de Narbona. Una bodega de vanguardia que apuesta tanto al turismo enológico cómo a las pequeñas vinificaciones de calidad. Dicho proyecto cuenta como enólogo consultor al más que conocido Michel Rolland. Posee habitaciones con vistas tanto a los viñedos como a la bodega, además de un acogedor restaurante. ¡Altamente recomendable para disfrutar de un gran fin de semana!
2010 es la primera cosecha de la bodega, y a pesar de eso es muy destacable. Vino intenso, recio y corpulento, con notas tostadas y de frutas maduras intensas, de acidez media alta. Típico Tannat uruguayo, que tiene espalda ancha para soportar varios años por delante.
El penúltimo establecimiento a destacar como dice el Tango es El Legado, la más reciente de las bodegas, con apenas 3 vendimias. Una pequeña bodega boutique que solo produce Tannat y Syrah, que dará mucho que hablar con el tiempo y único establecimiento en el país en utilizar el sistema de cordón vertical para sus vides.
Un vino de color muy intenso de aromas frescos e intensos, acidez y carga tánica importante aunque equilibrados. Indispensable acompañarlo con alguna carne especiada o pastas de salsas intensas. ¡SALUD!!